8 de enero de 2010

¿Conservar o cambiar su nombre?



Cuando los padres adoptivos conocen a su hijo, lo reciben con una historia, producto de nueve meses de embarazo y otros tantos de transición antes de llegar con ellos. Proviene de una madre y un padre biológicos que, con convicción o ambivalencia, finalmente deciden cederlo en adopción. Los progenitores también han inscrito su huella: el color de la piel y de sus ojos, su cabello, sus rasgos y su estatura. Y además le dan un nombre.

El nombre le brinda a todo niño identidad y sentido de pertenencia, justamente aquello que deseamos reforzar en él, un vínculo de pertenencia a nosotros y una identidad que le permita reconocerse como nuestro hijo, así como reconocerlo nosotros como hijo. Y tenemos la opción de elegir su nombre; tanto si conservamos el que le dio su progenitora, como si lo cambiamos por uno elegido por nosotros. Esto tiene implicancias en su vida ¿Qué debemos hacer?

URL abreviado: http://numrl.com/AyFnom

30 comentarios:

  1. HOLA,
    EN NUESTRO CASO, CUANDO ADOPTAMOS A NUESTRO HIJO NO TENIAMOS CLARO QUE HARIAMOS, PERO CUANDO SUPIMOS EL NOMBRE QUE LE HABIA PUESTO SU PROGENITORA INMEDIATAMENTE SIN SIQUIERA PONERMOS DE ACUERDO PASO A TENER EL PRIMER NOBRE MIO Y MANTUVIMOS EL SEGUNDO QUE HABIA PUESTO SU PROGENITORA. Y ESTAMOS FELICES Y SE DIO ESTO SIN QUE NADIE SE TUVIESE QUE PONER DE ACUERDO PREVIAMENTE. COMO RESUMEN QUIERO TRANSMITIR QUE AL MENOS UNO DE LOS NOMBRES DEBE SER ELEGIDO POR LOS PADRES ADOPTIVOS.
    cgonzalez@pahuilmo.cl

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  2. Yo prefiero pensarlo al revés. Prefiero decir que debemos conservar al menos uno de los nombres que trae cuando llega a nuestra familia, y ojalá este sea el primero. Y esto por dos razones. Primero porque el niño ha sido llamado durante varios meses de una determinada manera y ese nombre ha pasado ya a formar parte de su identidad. Sería un atropello simplemente borrarle de una plumada esa parte de su personalidad.
    La segunda razón es que el privarnos de ese "derecho" (el de ponerle su nombre) nos recuerda que nuestros hijos son sólo un préstamo, no son de nuestra propiedad; nos los entregan para que los criemos con amor y sacrificio para después dejarlos partir.
    Nosotros adoptamos dos niños. En el primer caso, le conservamos el primer nombre (que no era del gusto de mi esposa) y le pusimos el segundo. Durante mucho tiempo, en nuestro hogar se privilegió el segundo nombre para llamarlo. Sin embargo, a los pocos años, fue él quien decidió presentarse por su primer nombre.
    En el caso del segundo no hubo conflictos porque el primer nombre era del gusto de ambos y, al inscribirlo en el Registro Civil, mi esposa decidió cambiarle su segundo nombre por mi nombre de pila.

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  3. Primero que nada gracias por la invitación al foro.
    No me parece relevante la opción cualquiera sea la que se tome, tengo dos hijos uno de 14 y otro de 10 y les aseguro que los aciertos y errores son tantos, que conservar o no el nombre da lo mismo, en nuestro caso les pusimos nombres que nosotros elegimos.
    Respecto de la opiniones anteriores las respeto y me parecen coherentes y super respetables salvo cuando inccluyen el concepto de lo que "SE DEBE HACER", me parece que no hay un DEBE.
    Propongo otros temas:
    ¿Cuándo y como revelarles su condición de adoptados?, ¿deben saberlo?
    ¿Quienes deben saber sobre su condición de adoptados?
    ¿Es distinta la adolescencia de un hijo adoptado de la de un hijo biológico?.
    Saludos a todos.

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  4. Mis dos hijos tienen nombres puestos por nosotros. Opinó todo el mundo por los nombres, hasta el médico al cual le gustaba el anglicismo que traía mi hija. Pero le pusimos los nombres que teníamos guardados. No creo que sea taaan importante, ni que "debamos" hacer una cosa u otra. Lo que sí debemos cuidar es pronunciar su nombre con cariño; a mí me cuesta tanto a veces, sobre todo cuando los llamo 10 veces ¡¡y ni me miran!!

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  5. A mí me parece que lo más relevante de este diálogo es justamente lo que reseñan aquí algunos padres, esto es, que no hay un "deber ser o hacer" respecto de este tema. La pregunta sobre el ¿Qué se debe hacer? (respecto de conservar o no los nombres de nuestros hijos) ya induce una respuesta normativa y general.

    Saliéndonos de esta lógica, creo que es mejor pensar que cada familia es una realidad particular, que no hay mejores ni peores padres adoptivos según se tome una u otra decisión en este tema. Mas bien, a nosotros nos ha parecido que lo mejor es privilegiar el vínculo. Si un nombre facilitará o no este vínculo, de acuerdo a la realidad de cada pareja y a su cultura familiar, me parece que es mejor asumirlo.

    Finalmente, la identidad la dan las relaciones y, coincidiendo con el comentario más arriba, las relaciones amorosas y los nombres pronunciados con cariño son los que construyen en la seguridad y el amor.

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  6. Creo que se debe evaluar caso a caso. Si creo que después de cierta edad del niño(a) no es recomendable, ya que éste tiene su identidad creada o se debe hacer sutilmente poniendo un nombre sobre el otro lentamente para que se acostumbre a ambos y/o luego llamarlo por uno solo. En nuestro caso recibimos a nuestra hija a los 6 meses, fue fácil y no hubo problema, no mantuvimos ninguno de los que traía.

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  7. Cuando nuestros hijos son biológicos somos nosotros los padres quienes de alguna forma al acogerlos en familia los nombramos sea " Pablo, Beatriz ..... " y en esa acto " los hacemos y los reconocemos como propios" .

    Nombrar las cosas es hacer un acto interno de reflexión y "apropiación" ( sana) .

    Cuando un científico descubre algun ser no conocido, le llama y lo nombra y de esa forma "lo hace vivo" para la sociedad en la que se desenvuelve.

    Nuestros hijos no llevan su nombre escrito "por las estrellas". Somos nosotros sus padres quienes le damos un nombre.

    Si bien es cierto que por el aspecto legal deben tener un nombre , eso no priva su derecho ( hijo adoptivo) a que sus padres le asignen uno propio , particular , sanador y nuevo en su ingreso a esa familia en donde siempre han pertenecido.

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  8. Quiero agregar que este último comentario me parece un modo maravilloso de significar el acto de nombrar a nuestros hijos. Nosotros habíamos perdido un hijo antes de adoptar a la que hoy es nuestra primera hija, y le pusimos un nombre religioso. Esta fue la forma que encontramos de sentirla más "nuestra" en ese momento y de agradecer a Dios su ser y su presencia en nuestra vida. Esto no significa que nos sentimos sus "dueños"... ¿Cómo podríamos ser dueños de su vida si ni siquiera nosotros somos dueños de la nuestra?

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  9. En nuestro caso, adoptamos a dos mellizos y decidimos mantener sus nombres originales como segundos nombres, anteponiéndoles el que nosotros eligimos para cada uno de ellos. En realidad, seguimos el consejo de una psicóloga, y además consideramos que sus nombres originales eran hermosos. Por otra parte, estimamos que de esa forma respetábamos sus historia de vida desde inicios. Ignoro si en el futuro este tema tendrá o no un efecto significativo en desarrollo psicológico y emocional de los niños,y como señalan otras personas, hay otros temas que uno desde ya necesita manejarlos con mucha sabiduría. Ahora bien, en mi opinión lo relevante de un nombre, es que éste no produzca menoscabo a la persona que lo va a portar por el resto de su vida. Si es así, mejor cambiarlo.

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  10. YO SOY MADRE DE UN NIÑO ADPTIVO , LO ADPOTAMOS A LOS 3 MESES, EL PAPA DECIDIO IRSE DE LA CASA POR QUE PENSO QUE EL NIÑO IBA A MEJORAR LO QUE A EL NO LE GUSTABA DE LA REALCION CUANDO EL NIÑO TENIA 1 AÑO 8 MESES PERO SU DISTANCIAMIENTO COMENZO AL AÑO DE LA GUAGUA , POCO JUGO CON EL , NO LE DIO LA COMIDA NUNCA LO HIZO DORMIR POCAS VECES POR EL TRABAJO Y LUEGO SE CAMBIO DE CUIDAD A TRABAJAR , A LOS TRES AÑOS VOLVIO A VERLO PERO LO SACABA LLORANDO Y LITERALMENTE A LA FUERZA , EL VINCULO CADA DIA SE HA ECHADO PERDER MAS , AHORA MI HIJO TIENE 9 AÑOS Y NO QUIERE SALIR CON EL .EL FORMO OTRA FAMILIA CON HIJOS Y YO SU MAMA ESTOY SOLO CON EL , HA HABIDO TTO PSICOLOGICO Y PSIQUIATRICO DE POR MEDIO, AHORA HIZO DENUNCIA EN TRIBUNALES POR LAS VISITAS.ESTOY EN UNA DIFICIL SITUACION, ALGUIEN ME PUEDE AYUDAR

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  11. Cuando llego nuestra hija teníamos claro que le mantendríamos por lo menos uno de sus nombres (es parte de su historia). Finalmente se lo dejamos como 2do nombre, calzo perfecto con el que teníamos decidido. Para no generarle muchas confusiones al llamarla (nos llego de 2 meses), en un principio la llamábamos por los 2 nombres y con el correr de tiempo empezamos a llamarla solo por el primero. Hoy responde sin ningún problema por su primer nombre, excepto cuando se enoja, ;)

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  12. A la mamá separada:
    Te noto angustiada, sobrepasada, no se si te puedo ayudar, pero en mi opiión lo que describes no tiene que ver con la condición de ser mamá e hijo adoptivos respectivamente, se parece a todas o la mayoría de las situaciones de separación que conzco donde los más perjudicados son los niños, pero así es la vida. Deja que la historia fluya por dolorosa que sea, los tribunales son confiables. ¿tu tienes pareja?, hace mas de 8 años que esa historia se acabó, posiblemente esto sea parte del enredo; opino también que ayudaría si tu facilitaras q tu hijo salga con su papá, me da la impresión que tu no quieres que el niño salaga con su papá y eso influye.

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  13. Con mi Señora, adoptamos 2 gemelos, actulmente de 3 años. Llegaron a nosotros cuando tenían 2 meses. Respecto al tema de los nombres, no hay una regla general. Depende de cada caso en particular. No es lo mismo adoptar a un hijo apenas nacido que cuando tiene 3 o 4 años. Obviamente que si el niños tiene más de 1 año, por ejemplo, él ya reconoce su nombre como propio. Sin embargo en el caso de niños de pocos meses, no tiene relevancia y pienso que debemos respetar el deseo de los Padres Adoptivos. Para los Padres Adoptivos puede ser importante designar a sus hijos con el nombre que elijan, ya que es una forma de "apoderarse de sus hijos" y establecer desde un comienzo una relación de vínculo con ellos. Esto no significa que hay una relación de propiedad con ellos, sino más bien que marca un comienzo en la relación con él. En fin, yo creo que no se puede generalizar, pero en nuestro caso su progenitora, no los quizo ver cuando nacieron, y los entregó inmediantamente. Concuerdo en que ella hizo un gesto de amor al entregarlos en adopción, pero no exageremos las cosas. Nosotros, sus padres no tenemos deudas de gratitud con ella. Seguramente entregó en adopción porque no tuvo mas opción. Nosotros, como padres apoptivos, necesitamos crear, concientemente, lazos con nuestros hijos. Y si ponerle un nombre escogido por nosotros contribuye a eso, pues bienvenido.
    Gonzalo

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  14. Importancia del nombre para pueblos indígenas en Latinoamérica
    ( Resumen de la web para aportar al foro)

    Poner el nombre a un niño es uno de los rituales con los que algunos padres inician a los hijos en el mundo actual, en el mundo de la comunidad, dentro de la cultura a la que pertenecen. Realizar un ritual con la comunidad, ya sea en la tribu, en el clan, en la familia o en la iglesia, será poner en manos de todos los mejores deseos para la humanidad. Con esta sencilla acción se les otorgan a los iniciados los instrumentos que tenemos: los dioses, la fe en ellos, las fuerzas de la naturaleza, la humildad; lo que los padres tienen y quieren para sus hijos, lo que cree cada pueblo que les hace falta.
    Los padres ponen el nombre, los padrinos lo ratifican, los hijos lo llevan, la comunidad los reconoce como parte de su pueblo; todos pertenecen a un gran pueblo. Cuando los demás pronuncian un nombre identifican quién es ese o esa que responde a sonidos especiales y ven todo lo que es esa persona; conocen sus sentimientos, sus actitudes, su fuerza y su debilidad. Saben, cuando la llaman, que responderá o que sus oídos escucharán todos los significados que le hablan de la naturaleza, de Dios, de sus padres, hermanos, parientes y ancestros. Es por medio del nombre que el niño reconoce cada parte del universo, lo hace más grande, con él crea su propia historia y reconstruye la historia de su pueblo.
    En el nombre propio, la mayoría de las veces, se entreveran las expectativas que la familia y la comunidad han volcado hacia el individuo, lo estigmatizan, lo reconocen y lo incorporan a un sistema de reglas, dando así por sentado que ese individuo es responsable, pertenece al grupo y debe cumplir los distintos roles que tendrá que llevar a cabo dentro del ciclo de vida.
    En el nombre se ponían las esperanzas de lo que los demás esperaban de él, y así, tenía que ser ágil, inteligente, fuerte, etcétera, según lo dictará su nombre, de lo contrario perdía prestigio ante la tribu y podía defraudar a su familia.
    En los últimos años se ha desplazado ligeramente el uso del santoral católico por la práctica de asignar nombres de artistas, personajes de la pantalla chica o grande, personas que conocieron en algún momento, que leyeron en algún documento. Situación que es más evidente entre los pueblos que están, geográficamente, cercanos a las ciudades, más pendientes de los medios masivos de comunicación, o entre los migrantes que en los lugares de destino conviven con una variedad de costumbres y culturas que les ofrecen muchos nombres diferentes.
    Cabe mencionar que cada lengua indígena no sólo tiene rasgos culturales del pueblo que la practica, sino también préstamos que devienen de relaciones vecinales, alianzas, desplazamientos y migraciones. Así, entendamos que la lengua representa una larga historia de convivencia diaria con el entorno natural, social, económico y cultural; es una parte de la memoria histórica del grupo al que representa, es un diálogo entre la historia y la cotidianidad, es una construcción milenaria de las voces que nombran.

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  15. Nosotros tenemos dos hijos que fueron adoptados, a mi primera hija por respeto a su origen, le dejamos como tercer nombre uno de los nombres que le puso su progenitora, cuando ella dice su nombre se rie bastante al darse cuenta de que tiene tres, le explicamos el motivo de tenerlos y aunque es pequeñita aún para racionalizarlo creemos que lo va madurando de a poco, nuestro segundo hijo quedó como nombre de pila el nombre que le había puesto su progenitora y el segundo el del papá, esto fue así porque era uno de los nombres que teníamos escogido para él.

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  16. Mensaje para mamá separada,
    Te invitamos a que nos escribas a contacto@adopcionyfamilia.cl para conocer tu caso y poder contactarte con quien te pueda ofrecer apoyo y asesoría.

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  17. Hola antes que nada un saludo cariñoso de nuestra familia,la revista me parece un gran trabajo de parte de ustedes.Respecto de cambiar o conservar su nombre creo que es un tema dificil para algunos padres, no lo fué para nosotros ya que lo mantuvimos y le agregamos el que ha nosotros nos gustaba y nos calzó perfecto.Yo creo que su nombre como se le llamó la primera vez les dá una identidad que nadie más la tiene y uno no tiene el derecho de quitárselas, mi esposo y yo no tuvimos ninguna duda al respecto y estuvimos de acuerdo desde un principio .

    Gracias cariños
    ROSSANA SYMMA.

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  18. Creo que es bueno cambiar el nombre,asi se inicia una nueva vida empezando de cero,en nuestro caso nuestro hijo sabe todo y no tiene ningun rollo, es orgulloso de su familia y no tiene interes en saber, ni conocer de su familia biologica. El tiene 13 años, hasta ahora todo bien GRACIAS A DIOS.

    Familia AVILA PARADA, mil gracias por todo el apoyo de la Fundación.

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  19. Tengo gemelitas, son la adoración de nuestras familias, son un maravilloso regalo de Dios y la vida... no es fácil para una pareja infertil tener dos hijas a la vez es mucho lo que debemos aprender y en ese seguir aprendiendo, sentimos que los nombres de origen de nuestras dicen mucho de ellas, ahora que tienen un año y medio se diferencian tanto físico y psicologicamente, claro q la diferncia física solo es visible a los ojos de sus padres...aún y ciertamente no me las imagino con otros nombres, su primer nombre es el de origen y el segundo son los nombres de su madre y abuela materna y esa unión nos parece que nos marca entre su dualidad ente su pasado y su presente, lo que consolida sus historias de vida.

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  20. Hola.

    El cambiar el nombre o respetar el elegido por la progenitora es una decisión personal de los padres y como tal, respetable, sea cual sea la misma.

    Se dice que mantener al menos uno de los nombres es señal de agradecimiento hacia la progenitora y reconocer parte de la historia de nuestros hijos. Se les puede cambiar el nombre y no por eso vamos a dejar de estar agradecidos ni vamos a dejar de reconocer que nuestros hijos viene con una historia, que tienen el derecho de conocer y nosotros, como padres, la obligación de hacerles saber.

    En nuestro caso, mi esposa y yo queríamos mantener el nombre de la progenitora y elegir un segundo nombre como algo nuestro. Nuestro hijo llegó con un año de edad y con los dos nombres. Cuando lo recibimos, no dudamos ni un momento en mantener ambos. Uno de los motivos fue que ya tenía cierta edad y cambiarle alguno de los nombres podía dificultar en algo el proceso de apego, pero el principal motivo es que ambos nombres nos gustaron y desde el primer instante sentimos como si los hubiésemos elegido nosotros mismos.

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  21. Pienso que el nombre es parte de él o ella.
    En nuestro caso tenemos dos hijos adoptados .
    A nuestra primera hija le mantuvimos el nombre, ella era parte de ese nombre.
    A nuestro segundo nombre le cambiamos el primer nombre, por que el nombre que tenía era muy duro .
    Con respecto al comentario que hace:" Creo que es bueno cambiar el nombre,asi se inicia una nueva vida empezando de cero".
    No lo comparto nuestros hijos tienen una historia antes de conocernos y no con un nombre se las cambiaremos tenemos que aprender de esa historia es parte de nuestros hijos .

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  22. Nosotros, tenemos dos hijos el primero lleva el nombre, de su padre abuelo y bisabuelo, todos primogenitos, nos pareció que en este caso particular cr respetar esta tradición refuerza su pertenencia ser el unico con un nombre distinto podría o no haberse leído como diferencia.
    Nuesta segunda hija conservó el nombre que su progenitora le puso que nos parece hermoso y quisimos respetarselo y lleva mi nombre como segundo.
    creo que no hay reglas, si creo que el respeto por su historia es esencial, pero como en mi caso, cada situación es única.

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  23. Mi primer hijito tiene el nombre de sus dos abuelos y de mi esposo. Mi hijita tiene mi nombre y el de mi esposo en femenino.
    La decisión de los nombres, creo que tuvo que ver con darles y darnos el más preciso e irrefutable sentido de pertenencia de familia, aquella tan anhelada y que Dios nos había regalado y con la que nos bendecía.
    NO pensé jamás en poder haber arrebatado algo a mis hijos con la elección de sus nombres.
    Lo anterior me muestra que para todo en la vida existen tantos puntos de vista como seres en la tierra. Lo importante es no dañar a nadie en conciencia y reparar eventuales daños efectuados sin querer.
    Cariños

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  24. Es un tema personal y de familia, en nuestro caso optamos por dejarle su segundo nombre como el segundo ya que el primero fue elegido por nosotros. Lo hicimos por dos razones, uno porque creemos que es lo unico que traen y puedan quedarse de su origen y segundo porque nos gustaba, y creo que esto ultimo debe ser relevante, simplemente porque el nombre de nuestros hijos nos debe encantar al nombrarlo.

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  25. En nustro caso somos padres de un precisoso hijo, nosotros optamos por cambiar los nombres, pero creo que solo lo llamo por sus nombres cuando se porta mal ya que siempre le decimos "cachorro".
    Creo que cada familia decide lo que es mejor,lo importante es que la eleccion este llena de amor.

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  26. Por experiencia propia no hay edad para poner o cambiar un nombre. Es cosa de gusto e idenificación de las personas con las facciones,colorido y personalidad de los niños. Tenemos mucho tiempo como postulantes a padres adoptivos para pensar los nombres de nuestros futuros hijos. Como biológicos tambien tenemos el tiempo para pensarlos. Pero en nuestro caso en que se produjo la adopción a los dos años y meses de el, todo tuvo un desarrollo completamente atípico, ya que ambos nos adoptamos. Sus palabras textuales fueron " Quiero que tú seas mi Mamá y yo tú hijo y llamarme ... No aceptaba el nombre puesto por la progenitora. Por supuesto que yo lo adopté como mí hijo y acepté absolutamente el nombre elejido por el. Creo sinseramente que en caso de el está decisión personal fue reparadora para su historia pasada. Con mucha duda le dejé a pesar de... su nombre biológico como segundo nombre.
    Hoy está más grande y cuando conversamos sobre su historia hemos hablado tambíen de su nombre.Hace dos años recien aceptó el haberlo tenido y le encontró una semejanza con algo que para el es muy querido y significativo y siento que a la vez perdonó en parte su pasado.

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  27. SI BIEN NO EXISTE NADA DATERMINADO EN LA CRIANZA DE UN HIJO, CREO QUE TODOS ATESORAMOS ALGÚN NOMBRE QUE NOS GUSTA E IDENTIFICA MAS, EN NUESTRO CASO NUESTRO PRINCIPITO LLEGO DE SOLO DOS MESES, ASI QUE NO HABRÍA CONFUSIÓN PARA EL. DEJAMOS EL NOMBRE DE SU PROGENITORA COMO SEGUNDO,YA QUE AL MOMENTO DE LA REVELACION CREO QUE SERA IMPORTANTE PARA SU HISTORIA. Y EL NOMBRE DE MI ESPOSO SU PADRE COMO NOMBRE PRINCIPAL. POR CHOCHERA DE SU PAPITO.

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  28. En nuestro caso la pregunta era cómo se llamaría y cuando supimos decidimos conservar su nombre original, creímos que era importante porque le pertenecía a ella, es parte de su identidad.

    Y nuestro: tal como se comenta acá estaría el cariño que ponemos en pronunciarlo y nuestros apellidos. ADemás creo que como mamá lo que más me emocione es que mi hija nunca olvida que tiene 2 apellidos y a sus pequeños 5 años así lo especifica sin que nadie en conciencia se lo haya inculcado.

    Creo que lo más imporante es el cariño al nombrar a alguien. Creo que fue una buena decisión no cambiarlo, sólo lo habría hecho si el nombre pudiera generar burlas o bromas.

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  29. Tengo dos hijos uno biológico y otra adoptada, creo que el cambiar el nombre o dejárselo, no es tan importante a mi juicio lo importante es que los amemos de verdad.
    mi hija nos cambio la vida no solo a nosotros como papas, sino a toda la familia es la regalona de los abuelos, tíos y primos, cuando ella nos adopto a todos tenia un año seis mese hoy tiene 8 y ella sabe la verdad y la adoramos.

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  30. Fui madre gracias a la adopcion nuestro pequeño llego de 1 año 10 meses y con mi esposo decidimos dejarle su nombre por que no queriamos verlo en un futuro preguntando, mama como me llamaba antes?? es su nombre y lo amamos a el como el ser que llego a nuestra vida el ya tenia una vida antes de llegar a nuestro hogar , no empezo a ser un nuevo niño tal.. cuando llego a casa y a esa edad el ya reconocia su nombre encontramos un atropello ya suficientes perdidas como para que encima perdiera su nombre, pero cada quien es libre de hacer lo que considere, yo por amor a mi hijo le deje su nombre.

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