La búsqueda de orígenes en México

Pamela Ornelas
Centro de Estudios de Adopción A. C.

En México, como en otros países, se han presentado en los últimos años grandes cambios en lo que respecta a la aceptación de la figura jurídica de la adopción en la sociedad, y es que cada vez las familias adoptivas son menos señaladas y los solicitantes de adopción han abierto su abanico poco a poco a niños mayores de cinco años, con alguna discapacidad y a grupos de hermanos.

En este sentido, las familias en el día a día también se han abierto a tratar el tema con mayor naturalidad y tienen el deseo de hablar sobre cómo fue la llegada sus hijos a sus vidas, lo que indudablemente también les genera sentimientos de inseguridad, temor y falta de información para poder acompañarlos en el proceso.
No obstante lo anterior, los padres están dispuestos a contar con herramientas de soporte que les faciliten el hablar del tema y acompañar a sus hijos si es que ellos deciden emprender la búsqueda de sus orígenes. Esto lo pudimos comprobar en el interés mostrado por los padres adoptivos a participar en el taller “Hablemos de Adopción”, impartido por nuestro Centro en la ciudad de Guadalajara, el cual fue una experiencia enriquecedora tanto para los papás como para nosotros como institución, porque nos permitió conocer de cerca y aprender de esta realidad en las familias adoptivas.
Entre los miedos más frecuentes se encuentran la incertidumbre de los padres, quienes atribuyen erróneamente al hecho de que su hijo busque sus orígenes a algún tipo de insatisfacción de lo que ha recibido en su hogar, a que no está a gusto con ellos o incluso a pensar que una vez encontrando a su familia biológica, se querrá ir a vivir con ellos, o bien, si deben o no apoyar y acompañar al hijo en su búsqueda y cómo hacerlo.
Las instituciones mexicanas que realizan trámites de adopción juegan un papel importante en la búsqueda de orígenes, ya que están obligadas a proporcionar la información que tengan en su poder -cómo llegó, estado de salud, en ocasiones tienen la identificación de la madre y/o algún familiar, etc.- sin embargo, esta información pudiera no dar respuesta a todas las interrogantes planteadas por el adoptado, o en su defecto los adoptantes.
En este sentido, considero que tanto en México como en el resto del mundo, resulta indispensable hacer sentir a los padres la importancia que tiene el hecho de que en casa se hable con naturalidad del tema, de que el hijo busque y conozca sus orígenes en la medida de lo posible, ya que éstos le serán de gran utilidad para la formación de su identidad, la cual se va nutriendo de diferentes aspectos, como son la vida en familia, la educación, el origen, el temperamento, la autoestima, entre otros, razón por la cual se ha plasmado este derecho en legislaciones nacionales e internacionales.
En lo que respecta al derecho a conocer sus orígenes, la legislación mexicana lo contempla en leyes de diferentes ámbitos porque, al ser una República, las entidades que la conforman gozan de soberanía para legislar entre otras, en materia familiar. Sin embargo, también existe la Ley para la Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (federal), en la que se establece que todo menor de edad tiene derecho a conocer su filiación y origen, con excepción de casos particulares en que la ley no lo permite.
De igual manera, en el ámbito estatal, cada entidad contempla en diferentes ordenamientos -leyes de protección a la infancia, códigos civiles, leyes de adopción y códigos familiares- el derecho del interesado de conocer sus orígenes al ser mayor de edad, por medio de los adoptantes en caso de no serlo, o bien, cuando exista impedimento de contraer matrimonio.
Para concluir, me gustaría señalar que en México existe muy poca bibliografía local sobre la materia que pudiera, en su momento, aportar herramientas de acción a los padres adoptivos, por lo que es tarea del CdEA el sistematizar la información de los talleres y demás actividades que realiza, con la intención de conocer la realidad del país y, de esta manera, plantear proyectos y estrategias adecuadas que respondan a las necesidades de las familias mexicanas.